Con suavidad angelical me acerco a tu espacio para llenarte con mi dulce emanación.
Observa los resplandores de mi aura, ¡son vibrantes, llenos de colorido celestial!, y se proyectan en tu vida activando con intensidad tu creatividad, tu dinamismo y tu inspiración para que puedas transmitir a otros el entusiasmo del amor hacia los seres de luz.
Cada vez que quieras emprender un proyecto nuevo o sentir el consuelo celestial, acaricia suavemente esta pieza y de inmediato tendrás mi respuesta angelical.
Recuerda que hay muchos otros ángeles en tu vida, llenándote de luz.
Malcheadel el Ángel del Coraje.
Malchedael es el ángel que gobierna el sol y el signo de Aries.
Este ángel inspira entusiasmo, aventura y alegría.
También nos da protección especial, bendiciones, entusiasmo, la asertividad y la toma de conciencia.
Malchedael es uno de los 12 Ángeles
que gobiernan la Tierra en el panteón cristiano gnóstico.
Ángel: Malchedael, Malahidael
Significado: Rey de Dios
Principio: Activo, masculino, Yang
Signo opuesto: Libra
Palabra clave: Actividad
Metal: Hierro
Día de la semana: Martes
Número: 1 y 9
Significado: Rey de Dios
Principio: Activo, masculino, Yang
Signo opuesto: Libra
Palabra clave: Actividad
Metal: Hierro
Día de la semana: Martes
Número: 1 y 9
Flores: Geranio, clavel, peonía, anémona
Plantas: Dalia, ficus, áloe, filodendro, hiedra silvestre, maguey, cactus, naranjo, manzano, nogal, peral,
álamo, olivo, acanto, laurel
Esencia de Bach: Impatiens
Infusiones: Jengibre, albahaca, hierbabuena, ruibarbo, cilantro, damiana, comino, diente de león, tomillo.
Incienso: Mirra, clavel
Misión y dolencias
Aries rige sobre la cabeza, la cara, los dientes superiores, los hemisferios del cerebro, los órganos genitales externos, la vesícula biliar, el sistema muscular. La regencia de Aries es también sobre los órganos que se encuentran en la cabeza, por lo que las tendencias generalmente serán dolores de cabeza, jaquecas, migrañas, neuralgia, molestias en los ojos, oídos y dentadura.
Encender una vela blanca,
colocar tres claveles rojos en un vaso con agua.
Invócalo y habla con él francamente.
Ábrele tu corazón y dile exactamente todo lo que deseas.
Te ayudará a lograr la acción y empuje que necesites.
Invoco tu presencia ante mí,
necesito tu ayuda,
acude a mi llamada y socórreme
(petición).
Luego agradece su ayuda
y ten la seguridad de que todo saldrá bien.
Cuando se realiza la invocación, toda la energía debe concentrarse en el Chakra del poder o la autoafirmación, visualizando una luz amarilla intensa
en la zona del plexo solar.