¡Oh invencible Protector!
Asistidme a fin de corresponder dignamente
a vuestro amor y a vuestros beneficios,
y para trabajar con todas las fuerzas
en promover vuestro culto y vuestra devoción.
Igualmente os pido que,
por intercesión de Maria,
me alcancéis de Dios un celo fervoroso
para la práctica del bien
y una fervorosa devoción angélica,
que sean mi propia santificación y la del prójimo.
Igualmente os pido la gracia de...
Igualmente os pido la gracia de...
Gracias por todo tu amor
y por todos los favores concedidos.
Angel de la Guarda,
mi dulce Compañero.