Confiados en el grande amor
que has manifestado a los hombres
te suplicamos humildes
nos defiendas de las asechanzas
nos defiendas de las asechanzas
y tentaciones del demonio
en todos los pasos
en todos los pasos
Que alejes de nosotros
los peligros del alma y cuerpo
poniendo freno
a nuestras pasiones delincuentes
los peligros del alma y cuerpo
poniendo freno
a nuestras pasiones delincuentes
y a los enemigos que nos tiranizan,
que derribes en todas partes
y principalmente en el mundo católico
el cruel monstruo de las herejías
y la incredulidad que intenta devorarnos.