Glorioso Arcángel San Uriel,
poderoso en fortaleza,
imploro tu continua custodia
para alcanzar la victoria
Poderosísimo Arcángel Uriel,
tú que eres luz de Dios,
ayúdame a espiritualizar mi vida diaria
y ponme en armonía
con todos los habitantes de este mundo,
sin malos encuentros, sin odios y rencores,
sin disputas, sin envidias,
para mayor gloria de Dios,
Nuestro Señor.
Amén.